CCXPMX25 abrió sus puertas con la Spoiler Night, una noche exclusiva donde prensa, creadores y fans tuvimos el privilegio de cruzar antes que nadie el portal hacia lo que promete ser una de las ediciones más épicas de la cultura pop en América Latina. Y no es exageración. Esta convención no es solo un evento: es un verdadero crossover de mundos que reúne lo mejor del entretenimiento, el gaming, el cosplay, el cine y la pasión de miles.
Lo especial de la Spoiler Night es ese aire de tranquilidad previa, ese momento donde puedes caminar sin prisa por los pasillos y contemplar cada detalle con calma. Es cuando realmente puedes admirar la construcción de cada stand, tomar fotos, sumarte a las dinámicas, o simplemente dejarte llevar por la atmósfera. Es ese instante íntimo antes del rugido del fin de semana.
En mi caso, decidí arrancar por el booth de Nintendo. Me encontré participando por una playera de The Legend of Zelda, jugué una partida de FC 25 —que, por supuesto, tenía que probar ya que nunca lo había hecho— y completé mi check-in en My Nintendo para que me entregaran una bonita bolsa. Fue un momento que me transportó a mi infancia, donde cada detalle suma a esa emoción que solo una convención puede despertar.
Después pasé al stand de Crunchyroll, y de inmediato sentí que estaba dentro del Castillo Infinito de Kimetsu no Yaiba. La ambientación, las luces, los escenarios: todo estaba cuidadosamente armado para sumergirte en ese universo. Entre actividades, tomas fotográficas y hasta una cabina para practicar doblaje de voz, se sentía como vivir dentro del anime mismo.
Otro punto alto fue el booth de Free Fire. Ahí encontré un spot con una tabla de surf que servía como inicio para una especie de rally. Te tomabas una foto, recibías un pasaporte y comenzaba el reto: conseguir stickers jugando Free Fire y cumpliendo ciertos logros. Una dinámica divertida que te mantenía enganchado, buscando completar cada espacio como si se tratara de una misión.
Y así como esos, hubo muchos más momentos que se quedaron grabados. El stand de Universal Pictures, comandado por Jurassic World, era sencillamente imponente. Recreaba la emoción de estar frente a un enorme dinosaurio que en estos momentos olvide su nombre pero que juro actualizaré adelante. Panini, fiel a su estilo, trajo su clásico catálogo de mangas y cómics con promociones que hacían difícil salir con las manos vacías. Y Bandai México volvió a tentarme con los gashapones: me resistí… pero no del todo. Me quedé con las ganas de sacar los de PlayStation, aunque sé que en estos días voy a regresar por ellos.
Este primer vistazo confirmó lo que ya se intuía desde antes de entrar: que esta edición viene más grande, más fuerte y más emocionante que la del año pasado. El Artists’ Valley creció con más de cien talentos que ofrecen arte original y firmas inolvidables; el Thunder Stage by Cinemex ahora tiene capacidad para dos mil personas listas para emocionarse con cada presentación; y la Game Arena evolucionó a Game Island, un espacio donde las partidas, las retas y tus streamers favoritos son los verdaderos protagonistas.
El Magic Market, por su parte, se expandió como si alguien hubiera lanzado un hechizo de multiplicación: más de 60 tiendas con figuras, prints y tesoros coleccionables esperan a ser descubiertos. Y el Cosplay Universe no se quedó atrás, con camerinos renovados, un escenario nuevo y todo el respeto que merece la comunidad que convierte su pasión en arte.
Mañana, la fiesta comienza oficialmente. Las puertas de CCXP se abren de par en par para recibir a miles de fans y también a las estrellas que encenderán aún más este universo. Entre los nombres más esperados destacan figuras como Mads Mikkelsen, Xolo Maridueña, y muchos otros invitados que harán de esta edición algo simplemente inolvidable. Porque sí, lo mejor aún está por venir.