14 de agosto, 2024

Algo que me fascina del séptimo arte es cuando asistes a una función con expectativas neutras; es decir, no esperas mucho, pero tampoco poco, y mientras ves la película, toda esa neutralidad cambia drásticamente. Lo mejor de todo es cuando se inclina hacia el lado positivo, asegurándote que el tiempo que estés disfrutando del filme, tus sentidos explotarán al máximo.

Antes de comenzar esta reseña, quiero agradecer a Disney y Fox por la invitación a esta función especial, lo que me permite compartir con ustedes mi experiencia. 

Alerta de spoilers 

Empecemos con lo más importante: Fede Álvarez, el director que devuelve ‘Alien’ a sus raíces de terror, pero de una manera increíblemente fresca. Créeme, si eres gamer, especialmente fan del género survival horror, esto te emocionará aún más.

El contexto original se mantiene: los malvados magnates corporativos siguen siendo tan siniestros como siempre, los sintéticos permanecen envueltos en sospechas y esa esencia de incertidumbre sobre si podemos confiar en ellos o no. Nos encontramos atrapados en vehículos espaciales con esa estética de futuro desgastado que contribuyó a que la película original transmitiera una sensación claustrofóbica y realista. La estética de las naves, los controles táctiles, las cámaras granuladas, las palancas y botones, en resumen, todo lo que hace que todo se sienta tan monótono, pesado y lúgubre, al igual que un juego de supervivencia al estilo de ‘Resident Evil’ o ‘Clock Tower’.

Álvarez toma todos estos elementos familiares para los fanáticos y los utiliza para crear algo que atraerá tanto a la generación que vio nacer esta franquicia como a aquellos que nunca han visto un Xenomorfo ni han oído hablar del Nostromo. Lo mejor de todo es que no se necesita conocimiento previo para entender y sumergirse en la historia.

Desde el principio, hay guiños que los fans de la serie reconocerán, pero lo que destaca es el nuevo elenco y una historia que, aunque ambientada en el mismo universo, se siente completamente distinta a las anteriores. Esta combinación fresca, a pesar de los elementos conocidos, crea una experiencia innovadora, incluso cuando utiliza elementos visualmente retro.

Nos presentan rápidamente a los dos protagonistas principales, Rain (Cailey Spaeny) y su hermano Andy (David Jonsson). Ellos llevan el peso de la historia, con Spaeny destacando como una digna sucesora del legado de Ripley de Sigourney Weaver, mientras que Jonsson ofrece una actuación impresionante, transformándose de manera convincente de un personaje a otro a lo largo de la trama.

Los hermanos sobreviven en un planeta minero perpetuamente envuelto en la oscuridad. Rain sueña con escapar y vivir en un lugar donde pueda contemplar amaneceres y atardeceres. Sin embargo, pronto nos muestran la desesperada situación en la que se encuentran ellos y los demás habitantes del planeta, atrapados sin esperanza de huir a un mundo mejor. En este punto, todo parece predecible, ya que hemos visto esta secuencia miles de veces.

Todo cambia cuando un grupo diverso y peculiar se une para ejecutar un audaz robo en una nave aparentemente abandonada en la atmósfera. La tripulación, incluyendo a Spaeny y Jonsson, parece sacada de una película de terror adolescente, llena de discusiones inmaduras y conflictos que añaden tensión a la historia desde el principio. Esta estrategia es inteligente y sirve para establecer rápidamente las dinámicas de los personajes.

Y a medida que avanza la trama, la tensión solo aumenta, transportándome a esa época en la que jugué ‘Alien: Isolation’. Si no lo conoces, es un videojuego de género ‘survival horror’ lanzado en 2014 y considerado uno de los mejores de la década pasada.

A diferencia de las películas más recientes de Scott, que intentaron expandir la mitología y adoptar un enfoque filosófico, creando, en mi percepción, más preguntas que respuestas, Álvarez retoma el espíritu de ‘Alien’ y lo redefine como una entidad que te perturba y te hace sentir constantemente acechado.

Esta película no sería la misma sin esos elementos extra que te dejarán satisfecho. Fede nos ofrece más xenomorfos, más ‘sangre’, y más planos donde se pueden apreciar de manera detallada. En resumen, más de todo. Cada paso está meticulosamente planeado, con pistas cuidadosamente sembradas y una trama elaborada. Los personajes intentan tomar decisiones lógicas, pero las circunstancias perturbadoras a las que se enfrentan convierten cada elección en una batalla por la supervivencia, tal como actuarías tú en una situación así.

A diferencia de muchas películas de terror donde los personajes toman decisiones absurdas y terminan como simples víctimas, aquí los personajes son competentes la mayoría de las veces, actuando de manera racional, ya que recordemos que son fugitivos en busca de una vida ‘mejor’. Aunque sabes que el destino de muchos está sellado, te encuentras al borde del asiento, esperando que algunos logren escapar de las garras del terror, especialmente por el desarrollo de los mismos.

La historia, cuidadosamente pensada, está respaldada por la excelente dirección. El estilo visual combina la claustrofobia del original con impresionantes tomas abiertas que te dejan sin aliento. Si eres fanático de lo espacial, quedarás encantado con las escenas que te presenta.

Incluso en las escenas sin presencia alienígena, la tensión es palpable mientras las naves avanzan lentamente por el espacio, intentando acoplarse. Las escenas de acción en gravedad cero, aunque no son nuevas, se presentan de formas tan ingeniosas y novedosas que vuelven a emocionar al espectador.

En última instancia, Fede Álvarez toma elementos conocidos y los reinventa, convirtiendo lo familiar en algo nuevo. Si este es tu primer contacto con la franquicia, experimentarás el mismo asombro y temor que los espectadores de 1979 sintieron al enfrentarse al terror desconocido de ‘Alien’. Si jugaste ‘Alien: Isolation’, entenderás todas las referencias que Álvarez tomó para crear esta obra. El miedo, la emoción, el momento en que te das cuenta de que, al igual que los personajes, estabas conteniendo la respiración, intentando no hacer ruido para evitar ser descubierto.

Por cierto, de preferencia, véanla en IMAX.

Dios Gokú